La serie 250 de Renfe fue una serie de locomotoras eléctricas de fabricación germano-suiza planificadas por Renfe en la década de los años 1970 para cubrir un pliego de necesidades que existían en aquel entonces. La Serie 250 debía de ser apta para trenes de viajeros y mercancías por líneas electrificadas a 3000V; debían tener una potencia superior a 4500 kW para transportar trenes de viajeros a una velocidad de 160 km/h; y debían contar con 6 ejes para remolcar trenes pesados de mercancías.
La serie 250 entregada entre los años 1982 y 1987 constó de 40 unidades, 5 de las cuales tenían un equipo de control electrónico, tenían 2 bogies de 3 ejes (C'C'). Durante sus primeros años fueron utilizadas para remolcar trenes de viajeros pero los resultados de esta máquina no estaban a la altura de lo esperado por lo que su velocidad máxima se redujo y finalmente se emplearon solamente para tráfico de mercancías, con una velocidad máxima de 100 km/h.
A principios de los años 90 toda la serie 250 fue transferida al depósito de Valencia-Fuente de San Luis. Con la llegada de las locomotoras Serie 252, las locomotoras Serie 250 quedaron solamente para servicios de mercancías. Progresivamente adoptaron la decoración de la U.N. de Tracción con el cuerpo en gris y los testeros amarillos, lo que les valió el desafortunado apodo de "monjas".
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